EUSKADI AVANZA

H ay quien dice que la palabra txakoli viene de la expre- sión en euskera «etxeko ain» –lo justo para casa– con la que, según creen, contestaban los antiguos bo- degueros a quienes les pregun- taban por la cuantía de la pro- ducción; otros ponen el acen- to en lo artesanal y explican que deriva de «etxeko egina» –hecho en casa–, y algunos se ponenmás solemnes y asegu- ranque fonéticamente recuer- da al inicio de la oración con que los judios bendecían sus parrales y sarmientos, por lo que sitúan su origen en algu- na aljama vasca. En cualquier caso, y pese a que la denomi- naciónno aparecehasta el XVI, el vino afrutado, de grado li- gero y puntito de acidez que hoy llamamos txakoli ya se producía en el siglo IX. Y sin embargo, a finales del XX es- tuvo a punto de desaparecer. EnGipuzkoa sólo quedaban 21 hectáreas de viñedo dedi- cadas a la producción de este caldo cuando a principios de los años ochenta un grupo de bodegueros inició su recupe- ración. Un esfuerzo que logró su primer gran éxito en 1989 con el nacimiento de la deno- minación de origenTxakoli de Getaria, hoy ampliada a otros pueblos de la costa hasta abar- cer 431 hectáreas. Les siguieron los vizcaínos, que lograron la denominación de origen para su txakoli en 1994, y finalmente en 2001 los alaveses, aunque, como en Bizkaia, en este territorio la producción ya se había activa- do desde finales de los 80. Los primeros cuentan hoy con 38 bodegas que se reparten 415 hectáreas de viñedos, y los se- gundos, con ocho bodegas y cien héctareas. «Yo creo que somos la denominaciónde ori- genmás pequeña del univer- so», bromea Josean Merino, gerente del consejo regulador deArabakoTxakolina. «Cuan- do empezamos sólo había cin- cohéctareas y cayendo. Ha sido un esfuerzo muy arduo, de mucho trabajo, mucha inver- sión –pública y privada– ymu- cha visita a ferias por todo el mundo», reconoce sin negar tampoco que las tendencias de consumo han estado a su In txakoli veritas Los productores de Bizkaia y Álava innovan para elaborar nuevas versiones del tradicional vino vasco favor. «Creo que una de las claves de la recuperación ha sido ha- bernos desarrollado cuando empezaba a gestarse el incre- mento del consumo de vino blanco. Nuestras denomina- ciones nacieron en una época en la que comenzaba la curio- sidad por el blanco, pero en la que las referencias eran casi exclusivamente los vinos de Rias Baixas y Rueda», coinci- deGarikoitz Ríos, fundador de Bodega Itsamendi, deMuskiz, y vocal de BizkaikoTxakolina. «Ese incremento de la de- manda de blanco nos ha faci- litado la introducción del pro- ducto y también la fideliza- ción de muchos consumido- res locales», subraya Ríos, esta vez sin el consenso de Meri- no. «En nuestro caso aún te- nemos mucho que pelear en casa. Llegamos los últimos y, comono teníamos infraestruc- tura, tardamos en lograr la de- nominación, de modo que el txakoli deBizkaia y, sobre todo, el deGetaria ya habían ocupa- do ese hueco en Álava, espe- cialmente en Vitoria», mati- za. Finalizada la vendimia, este año los alaveses esperan ela- borar 490.000 botellas con los 505.000 kilos de uva recogi- dos. Son cifras muy por enci- ma de las del año pasado que, con un septiembre especial- mente frío y lluvioso, «resul- tó malísimo» y tiró por tierra todas las previsiones hechas en primavera dejando la pro- ducción en 350.000 botellas. En Bizkaia, en cambio, este año será peor que el anterior. Las bodegas han registrado la recogida de 1.800 toneladas de uva, con las que elaborarán 1,6 millones de botellas. Habrá poca uva –hasta un 23% me- nos que el año pasado– por la climatología adversa de toda la primavera y la primera par- te del verano, pero de gran ca- lidad porque el buen tiempo de agosto y septiembre permi- tió sumaduración. Es uno de los mayores pro- blemas del sector: la imposi- bilidad de controlar la produc- ción agraria se nota especial- mente en un cultivo que ya de por sí es escaso. «Estamos en una zona excepcional para producir vinos blancos de ca- lidad, y aunque son laboriosos sus resultados son agradeci- dos», subraya Ríos. Y, pese a lo tradicional del caldo, buena parte de esos re- sultados agradecidos llega con la innovación. «Ya no sólo te- nemos vinos jóvenes. Hay gen- te que está expermientando y sacando al mercado cavas, rosados, vinos dulces e inclu- so de lágrima», enumera Me- rino. «Hemos tenido la capaci- dad de leer las posibilidades de elaborar diferentes txakolis, explorando un tipo de produc- tos basados en su capacidad de guarda –tiempo que se puede conservar–. En este tipo de productos haymás personali- dad ymás valor añadido. Ade- más se ha desarrollado un enorme trabajo en la viticul- tura, mejorando muchísimo la calidad de lamateria prima», explica Garikoitz Ríos. Ahí está, segúnMerino, otro de los retos: la investigación para mejorar la resistencia de la uva a plagas inevitables con un clima tan húmedo. «En cualquier otro sector se aplau- de cuando se oye hablar de innovación y aplicación de nuevosmétodos de producción, pero en la agricultura tiene muy mala prensa pese a ser tan ne- cesaria como en cualquier otra ac- tividad y poder ser respetuosa con el entorno. La innova- ción puede convivir con la tradición y la convicción de que pro- ducimos dentro de unas denominaciones de origen y, además, de una zona vitícola muy diferente al resto de Es- paña. Elaboramos productos conmucha identidad», dicen ambos. De cara al futuro, junto a la innovación, Garikoitz Ríos también destaca la necesidad de dignificar el sector «con todo lo que conlleva». «Es in- dudable que hace falta la pro- fesionalización en el ámbito comercial para cerrar el ciclo de la vitivinicultura, donde el camino está bastante bienmar- cado», dice. «Aquí estamos más acos- tumbrados a los tintos, pero a nivelmundial el vino quemás se vende es el blanco, con lo que el txakoli encajamuy bien fuera y está consolidado enEs- tados Unidos y es bien recibi- do en países deCentroeuropa. Ahora estamos llegando a Ca- nadá, Inglaterra o Finlandia e incluso a Japón, donde valo- ranmucho todo lo artesanal», coinciden. Las denominaciones del txakoli llegaron cuando el mercado se empezaba a interesar por el vino blanco En Bizkaia hay 415 héctareas de viñedos dedicadas al txakoli y en Álava, cien. :: I. B. Frente a la industria del txa- koli, que aún pelea por ha- cerse un hueco en el merca- do, en el País Vasco tenemos un ejemplo de cómo de las vides se puede sacar mucho más. En Rioja Alavesa cuen- tan desde 2006 con una aso- ciación, La Ruta del Vino, de- dicada a promover el turis- mo en la comarca con activi- dades que tienen el vino como eje verterbrador. «El año pasado recibimos a 170.000 visitantes, pero la zona recibió aúnmás porque hay bodegas que no están in- tegradas en La Ruta. Son da- tos que muestran un creci- miento sostenido, que se ve aún mejor en el gasto que esos visitantes realizan. Este asciende ya a 170 euros por persona y día, un 8%más que el año anterior», explica Ma- riasun Saenz de Samaniego, presidenta de la asociación. Además, ha variado el per- fil de los turistas, «que antes era casi exclusivamente na- cional». «Cada vez vienen más extranjeros y creemos que además es ahí, en la pro- moción en el exterior, don- de más podemos crecer», ex- plica. Otro objetivo es alar- gar el tiempo que los turis- tas permanecen en la región. «Alrededor del vino hay his- toria, cultura, paisaje... Todo eso tiene que ayudarnos a crear diversidad en nuestra oferta. No todo es comer y beber, sino que se puede dis- frutar de salidas o espectácu- los y aprovechar la tempora- da baja para hacer de Rioja Alavesa un destino para quie- nes quieran recibir forma- ción sobre vino y enoturis- mo», enfatiza. El vino, eje vertebrador de Rioja Alavesa VITICULTURA IRATXE BERNAL EUSKADI AVANZA Martes 11.12.18 EL CORREO 12

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