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osasuna-salud

23/11/15

+

La enfermedad renal es una de

las patologías crónicas de mayor

prevalencia en nuestro entorno;

de hecho, se calcula que el 10%

de la población en Euskadi la su-

fre. Por millón de población, unas

1.200 personas requieren trata-

miento renal sustitutivo: hemo-

diálisis -viéndose obligados a acu-

dir a centros autorizados para ga-

rantizar una correcta depuración

de la sangre cuando el riñón ha

dejado de funcionar-, diálisis pe-

ritoneal o son portadoras de un

trasplante renal. En la capital viz-

caína, la multinacional Fresenius

Medical Care, referente mundial

en desarrollo de productos y tra-

tamientos para personas afecta-

das de esta patología, ha abierto

el nuevo Centro de Diálisis Bil-

bao. En colaboración directa con

Osakidetza, la clínica trata a pa-

cientes derivados de los hospita-

les de Cruces y Basurto.

Esta clínica cuenta con lo últi-

mo en equipamientos, así como

con un equipo médico y de enfer-

mería para poder atender a este

colectivo durante las sesiones de

la hemodiálisis. El paciente acu-

de al centro tres veces por sema-

na para recibir su tratamiento y es

controlado por los facultativos de

la clínica, situada cerca de La Ca-

silla. «Garantizamos una calidad

médica muy alta, siempre colabo-

rando con los servicios de la sa-

nidad pública, que nos derivan los

pacientes. Para muchas de estas

personas es más cómodo acudir

al centro de Bilbao para recibir su

tratamiento», señala Armin Karch,

vicepresidente en Europa Occi-

dental de Fresenius Medical Care.

Mejorar diagnóstico y

prevención

No obstante, los planes de esta

compañía de salud internacio-

nal van más allá de los propios

tratamientos que a diario dispen-

san en esta clínica. Así, buscan

aprovechar sus décadas de expe-

riencia y estudio sobre esta enfer-

medad crónica para mejorar otras

fases previas a la diálisis y lograr,

el día de mañana, evitar llegar a

este tratamiento siempre que sea

posible. «La sanidad vasca es un

referente en el manejo de muchas

enfermedades crónicas y consi-

deramos que hay que trabajar en

esta misma línea con las patolo-

gías relacionadas con la insufi-

ciencia renal, buscar mejoras en

la prevención y diagnóstico más

temprano para impedir tener que

llegar a tratamientos de por vida»,

señala Karch.

En este sentido, pone como

ejemplo el trabajo que Fresenius

Medical Care está realizando en

Estados Unidos para mejorar el

diagnóstico y tratamiento de los

pacientes con enfermedad renal

crónica, anticipando futuras com-

plicaciones, evitando ingresos hos-

pitalarios y así contribuyendo a

una mejor calidad de vida de las

personas con esta enfermedad.

A nivel mundial, la compañía

trata a más de 290.000 pacientes

en su red de 3.390 clínicas repar-

tidas en más de 50 países, lo que

la convierte en uno de los mayo-

res expertos en la gestión de la

enfermedad renal. En España,

bajo la marca NephroCare, la

compañía presta servicio a 5.000

pacientes en 60 clínicas especia-

lizadas en hemodiálisis. Fresenius

Medical Care opera en el PaísVas-

co desde hace más de 20 años,

mediante la provisión de equipa-

miento y fungibles a los hospita-

les de Osakidetza, colaboración

que amplió en 2012 con la ges-

tión del Centro de Diálisis

Bilbao.

z

Fresenius Medical

Care ha abierto

NephroCare Centro de

Diálisis Bilbao en

colaboración con

Osakidetza para

pacientes

provenientes de

Basurto y Cruces

T

El centro de Bilbao cuenta

con una nueva clínica de diálisis

::

La clínica dispone de los equipos más avanzados para tratar a los pacientes.

La insuficiencia renal es un pro-

blema serio para la sanidad pú-

blica. Cuando el riñón deja de

funcionar, sólo hay dos posibi-

lidades: el trasplante -dificul-

tado por la escasez de órga-

nos que existe hoy en día- o la

diálisis, bien domiciliaria o he-

modiálisis, como dispensa el

Centro de Diálisis Bilbao. «Los

tratamientos pueden alargar-

se toda la vida, porque esta fun-

ción de depuración es vital para

el organismo», recuerda Armin

Karch.

Además del elevado número

de pacientes que la sufren, al

ser una enfermedad crónica los

costes también son importan-

tes, de ahí la necesidad de tra-

bajar en la prevención. Además,

tal y como señalan desde Fre-

senius Medical Care, en los úl-

timos años no ha hecho más

que aumentar la cantidad de

pacientes con patología renal

debido al aumento de la espe-

ranza de vida, a la mejora en el

diagnóstico y en la calidad del

tratamiento, pero también al in-

cremento de casos de enferme-

dades como diabetes e hiper-

tensión, dos de los factores de

riesgo más importantes para

desarrollar una insuficiencia re-

nal.

Una enfermedad crónica en alza

Un 10% de la

población

vasca sufre la

enfermedad renal